De nacer del interior de una empresa que ya tenía casi 30 años de estar operando, Mercadito Móvil, que ofrece productos básicos casa por casa, crece, evoluciona y a siete años de surgir se mueve ahora con vida propia, con planes de consolidación basada en dos principios: calidad y excelente servicio, y utilizando al máximo las ventas en línea herramientas tecnológicas.
Keila Rodríguez Ramos, la directora de esta empresa, expone lo que hacen y planean, luego de haber logrado pasar la barrera de los cinco años, que muchos emprendimientos no pueden superar, y crecer con los altibajos propios de la vida empresarial.
Mercadito Móvil, como su nombre lo dice, ofrece productos que se ofrecen en un mercado, pero con la ventaja que son entregados de manera directa a los hogares sin que ello implique un sobrecosto por el servicio de entrega.
Los productos que ofrece tienen la cualidad de ser artículos de primera necesidad y consumo repetitivo, que van de agua purificada (de la marca Aquamiller), tortillas Cheras, machaca, leche de diferentes marcas y en distintas presentaciones, te de Jamaica y Jazmín, bolis, “isotónica” (bebida refrescante e hidratante en bolsitas) y ahora por ser temporada decembrina, también se ofertan buñuelos.
En nuestros planes, dice, se contempla incrementar el catálogo de los productos que se ofrecen, pero siempre en función a las necesidades que se vayan detectando con los clientes.
La directora de Mercadito Movil reconoce aquí la importancia del personal que diariamente recorre las calles de Culiacán, ya que ha aprendido a escuchar a la clientela cuáles son los productos que más se piden y cuáles de los que no se ofertan se deberían incluir.
En el reconocimiento al personal, resalta que el mayor estímulo que tienen para ofrecer un buen servicio es que además de recibir todas las prestaciones laborales de rigor, reciben también una comisión por las ventas que realicen, lo cual les mejora sus ingresos.
Al preguntarle cuándo y cómo nace Mercadito Móvil, Keila explica que nace de la necesidad de conectar una marca con el verdadero fin de la empresa, llevar a domicilio los diferentes productos como un MERCADITO MÓVIL, facilitando así su día a día.
La clientela de Aquamiller, recuerda, empezó a solicitar tortillas y entonces se añadió este producto y te de Jamaica y de Jazmín y luego se detectó que también había demanda para más productos de la canasta básica y de uso frecuente en el hogar.
Fue ahí, expuso, que surge Mercadito Móvil, que fue en 2019, aprovechando los canales de comercialización y logística de distribución que ya tenía Aquamiller.
La aceptación que se tuvo, recuerda, fue tan buena que entonces Mercadito Móvil empezó a moverse con vida propia y entonces Aquamiller concentró sus esfuerzos ser productor y se convirtió en proveedor de la nueva empresa.
Keila Rodríguez resalta que un elemento que ha resultado vital para el crecimiento de Mercadito Móvil es la tecnología.
Se tiene una aplicación –explica–, mediante la cual los clientes pueden hacer sus pedidos y se les atiende con prontitud.
Reconoce que hay tiendas de autoservicio que también ofrecen llevar a domicilio los productos que se les pidan.
La diferencia, aclara, es que Mercadito Móvil no aplica un cobro extra por el servicio a domicilio, como sí lo hacen esas tiendas de autoservicio.
Además, resalta, los precios de los productos que ofrece Mercadito Móvil prácticamente son similares a los que se compran en los supermercados o mercados de manera directa por los clientes.
No aplicar un cobro extra por el servicio a domicilio, dice, sí implica un esfuerzo para Mercadito Móvil porque mover camiones y cubrir salarios del personal que hace la entrega de los productos, definitivamente que sí requiere de un costo, que no es bajo.
Para consolidar a Mercadito Móvil como marca, está trabajando arduamente en una estrategia de conversión y posicionamiento de marca que, estamos seguros, mejorará el servicio y la experiencia de y para nuestros clientes.
