El Colectivo de Organizaciones y Empresarios (CORE33) demandó de legisladores federales que vuelvan a reformar la Ley Federal del Trabajo para acabar con la contradicción de promover horas extras y al mismo tiempo sancionar y penalizar a empresas que paguen más de 10 horas extras a la semana.
El presidente en turno de CORE33, Luis Enrique Bolaños Amador, expuso que ante esa disyuntiva, la principal recomendación que se hace a todas las empresas es que se abstenga de otorgar 10 horas extras o más a ningún trabajador o trabajadora.
Es lamentable, dijo, que por un lado se pretenda garantizar un ingreso extra a la parte trabajadora estableciendo un pago triple por cada hora extra trabajada, y por otro lado se sancione y se penalice a la parte empresarial por otorgar 10 horas extras o más a uno o más trabajadores o trabajadoras.
Hay actividades, agregó, que permiten a las empresas solicitar a sus trabajadores que se queden a trabajar horas extras, e incluso hasta los mismos trabajadores y trabajadores se proponen y solicitan trabajar horas extras.
Entre esas actividades citó la agrícola, el servicio a comensales en restaurantes, entre otras.
Lo peor de esta disyuntiva, expuso, es que en el mismo apartado de la Ley Federal del Trabajo donde se dispone que los trabajadores pueden trabajar horas extras a cambio de que se le pague el triple de lo que se paga una hora ordinaria, también se establece multa y una sanción penal a las empresas que otorguen más de 10 horas extras a un trabajador o trabajadora.
Ello implica, expuso, que la Cámara Federal de Diputados debe revisar la reforma que aprobó a la Ley Federal de Trabajadores y elimine esa contradicción.
Aclaró en los casos de horas extras, las empresas ya cumplen con pagar el triple de lo que se paga una hora ordinaria.